Cuando hay silencio el tiempo se detiene. En este rostro hay una luz susurrante , viva como una vela encendida… su mirada es como un eco latente que nos deja una huella de profunda quietud, cada instante al contemplarla es perfecto.
Si te detienes y descansas un segundo sobre sus ojos…sentirás los sonidos mas profundos y la belleza de un espacio donde solo importa estar.